Organizando viajes
- lectura de 2 minutos - 414 palabrasKike ha organizado con Jimena un desayuno del Krom Krupet 1 esta mañana. Casi morimos del empacho en la terraza con la brisa, el pan con aceite y tomate, los churros camboyanos… Hemos estado aprendiendo con Kike sobre usos y costumbres camboyanas (lo añadiré en cuanto pueda al post correspondiente).
María y Ana se han sentado con el sobrino de Kike en otra mesa y han estado aprendiendo sobre política. Os cuento un poco de lo retransmitido. El actual presidente camboyano es un antiguo jemer de unos setenta y tantos años que pretende seguir en la presidencia hasta que se muera. En este momento hay tres partidos mayoritarios, uno que lleva una mujer, otro que es el más fuerte y seguido y el archiconocido Cambodia People’s Party. Como buena república bananera, o mejor dicho reino bananero, las elecciones son de todo menos claras. Este año han sido especialmente sonadas porque por algún motivo, a pesar de tener otro partido más votos, el Cambodian People’s Party sigue ganando las elecciones. Además de forma curiosa, el candidato de la oposición fue arrestado antes de que pudiera presentarse a las elecciones y absuelto una vez finalizado el periodo de presentación de candidatura. Alucinante vaya.
Tras el desayuno fuimos con Kike a ver unas estatuas que hay por la Prefectura, encargadas a un artista local.
Aprovechamos después para recoger todos los medicamentos, hacer inventario y darle a Jimena un pequeño detalle que le habíamos comprado como agradecimiento.
El día por lo demás fue muy calmado. Comimos en el Gecko, un restaurante también occidentalizado cerca del Lonely Tree donde estaba todo muy bueno y después fuimos al Lotus, una cafetería también muy apetecible a tomarnos un café y aprovechar la wifi para mirar los hoteles e itinerario de nuestro viaje inminente.
De noche compramos con los demás voluntarios pizzas que luego llevamos a Tahén, para dar a los niños en su día de película. Menudas bazofias que les gustan, tanto de pizza como de película.
Una vez acomodados los niños nosotros nos fuimos al Here Be Dragons, un hostal con bar en el centro de Battambang, cerca del río, donde las cervezas son a un dólar y la habitación con dos camas dobles a 8. El sitio estaba animado y lo pasamos muy bien. Para cerrar la noche intentamos ir a Sky, una discoteca camboyana de la que nos había hablado Bopáh, pero estaba cerrada. Mala suerte, pero casi mejor no alargar la noche demasiado, que mañana toca fabada.